Desde que elegí el carrito de bebes para mi niña han pasado unos 4 años, no obstante, al margen de algunos modelos nuevos y algunas pequeñas novedades tecnológicas creo que no ha cambiado mucho el panorama.
Sin embargo, la información disponible en Internet es cada vez mayor y puede resultar en ocasiones desbordante. Por eso, para aclararme, lo primero que voy a hacer es clasificar todos los factores que pueden influir en la elección del carrito, en cuatro grandes grupos. Después espero poder seleccionar aquellos que, en mi caso son determinantes, para hacer una criba inicial y así limitar el número de modelos que tengo que analizar.
Para empezar, podemos agrupar los factores en constructivos, funcionales, ergonómicos y económicos.
- Factores constructivos: valoraremos principalmente la calidad de los materiales con los que está fabricado el cochecito, el tipo de estructura, el diseño, las dimensiones, etc. Esto factores pueden tener gran influencia en la vida útil del carrito. No es lo mismo un carrito con chasis de acero que un carrito hecho de aluminio. Por otra parte estos factores serán determinantes según el uso que vayamos a dar a un carrito, si el carrito de bebe va a ser utilizado predominantemente en ciudad no necesitaremos que sea tan resistente como uno que va a moverse por campo o por terrenos tortuosos.
- Factores funcionales:. ¿Que entendemos por funcionalidad?, pues de forma sencilla podemos decir que un cochecito será más funcional cuanto más nos facilite la vida desde el momento de la compra. Los materiales y el diseño del carrito influirán directamente en la funcionalidad del mismo. A tener en cuenta los siguientes factores:
- Dimensiones y peso del carrito.
- Facilidad para el plegado o desmontaje.
- Lavado de los elementos de tela.
- Sustitución de piezas estropeadas.
- Accesorios como bolsas, habitáculos, sombrillas, que nos facilitan tareas cotidianas (ir a la compra, llevar las cosas del bebe, etc).
- Factores ergonómicos: nos referimos a aquellos factores que van a repercutir en la fisiología y anatomía, tanto del bebe, como del adulto que va a empujar el carrito. A este respecto volvemos a incidir en las dimensiones y el peso del carrito. No será adecuado el mismo carrito para un padre/madre de 1,90 m que para uno/a de 1,60 m.
- Factores económicos: Por ultimo, según cada situación personal, deberemos considerar cuanto dinero queremos o podemos destinar a la compra del carrito de bebe. A priori, podríamos pensar que cuanto más caro sea un carrito de bebe mejor será, pero esto no tiene por qué cumplirse siempre, ya que muchas veces también se paga el diseño y la exclusividad. Vamos, como en los coches de verdad.
En las siguientes entradas iremos desgranando de forma detallada los principales factores que hemos visto y empezaremos a analizar distintos modelos de cochecitos para ir acercándonos al que más nos convenga.